El volumen creciente y la sofisticación de los ataques de phishing y los intentos de robo de identidad son particularmente preocupantes para las empresas más grandes, donde cada empleado y su tecnología representan un eslabón débil potencial que amenaza a toda la red. Sin embargo, las empresas de seguridad cibernética no se han quedado de brazos cruzados mientras los piratas informáticos y los atacantes se vuelven más inteligentes. La industria también ha evolucionado.
Los expertos en seguridad de hoy en día recomiendan recurrir a las siguientes tres tácticas para ayudar a las empresas a prevenir ataques.
La formación se ha convertido en una prioridad
Quizás la mayor vulnerabilidad cuando se trata de ataques de phishing son los propios usuarios. Incluso con la mejor tecnología y estándares implementados, un usuario descuidado, o incluso uno que simplemente no reconoce un ataque, puede causar caos.
Si bien la educación no es la bala de plata para detener los ataques de phishing, sí reduce significativamente la cantidad de ataques que tienen éxito y puede ayudar a llenar los vacíos donde la protección basada en tecnología se queda corta.
Aprendizaje automático e IA implementados de forma proactiva
El aprendizaje automático y la inteligencia artificial (IA) se han convertido en pilares de la industria tecnológica, y el sector de la seguridad cibernética ha capitalizado las tecnologías. Cuando se trata de ataques de phishing, esto es sin duda una bendición, ya que el volumen de intentos y vulnerabilidades continúa expandiéndose.
Al escanear y aprender sobre nuevas vulnerabilidades mientras monitorea las comunicaciones, el aprendizaje automático y la ciberseguridad impulsada por IA siempre pueden estar al tanto de los nuevos vectores de ataque y reconocer las señales de alerta más rápido que el ojo humano.
Mejorando el control de acceso
Algunas innovaciones no tienen que recrear la rueda para causar impacto. De hecho, una de las herramientas más útiles que han encontrado las organizaciones y las empresas de seguridad cibernética es una de las implementaciones más sencillas, mejores y más aplicadas de la autenticación de dos factores (2FA).
El objetivo de muchos casos de phishing es comenzar por descubrir las credenciales de acceso de un usuario a través de un sitio falso que se hace pasar por uno legítimo. Cuando los usuarios ingresan su contraseña, se la roban de inmediato. Sin embargo, 2FA puede reducir significativamente este riesgo al requerir una capa adicional de seguridad que no está vinculada a las contraseñas de los usuarios. En muchos casos, una credencial de segunda capa puede ser un código enviado por SMS o mensajería encriptada a los usuarios que pueden ingresarlo en su pantalla de inicio de sesión.
Estos tipos de 2FA se pueden omitir, aunque siguen siendo una herramienta valiosa. Por otro lado, muchas empresas (como Google, por ejemplo) utilizan claves de seguridad físicas que generan códigos aleatorios que no se pueden descifrar fácilmente.
Si bien un regreso a la seguridad física suena subóptimo para muchas empresas, también ofrece una medida de seguridad más infalible. Los generadores de tokens y claves aleatorias son relativamente fáciles de implementar y tienen el beneficio adicional de no requerir que las contraseñas se transmitan a través de comunicaciones vulnerables antes de que se usen para iniciar sesión.
Una batalla constante
Independientemente de la innovación que realicen las empresas de seguridad cibernética, la batalla contra el phishing se libra constantemente. Los piratas informáticos continúan evolucionando sus tácticas para eludir incluso las herramientas más avanzadas, pero la industria no se ha quedado de brazos cruzados. En cambio, la tecnología y los métodos que usamos para proteger nuestros negocios contra el phishing también continúan mejorando.