El impacto de la inteligencia artificial en la educación
Prácticas pedagógicas de IA: IA para la instrucción
Desde la aparición de ChatGPT, se ha hablado mucho en educación sobre aplicaciones y herramientas de inteligencia artificial (IA). Gran parte del debate se ha centrado en cómo la IA reemplazará a los profesores y cómo los estudiantes utilizarán la IA para escribir sus trabajos y completar tareas y proyectos. Si bien ambas cuestiones pueden tener algún mérito, es importante remodelar la forma en que nosotros, como docentes, abordamos el uso de la IA en el aula a medida que ingresamos al nuevo año escolar. La IA llegó para quedarse y será parte del futuro de nuestros estudiantes, por lo que debemos tenerla en cuenta en nuestra instrucción y su aprendizaje.
Cuando se trata de IA e instrucción, será necesario crear nuevos enfoques para adaptarlos. Por ejemplo, podemos desarrollar lecciones y actividades que involucren ChatGPT, fomentando el pensamiento crítico y evitando que los estudiantes dependan únicamente de la IA para obtener respuestas. También podemos enseñar a nuestros estudiantes cómo utilizar la IA de manera ética y efectiva en sus procesos de aprendizaje, escritura e investigación. Además, podemos utilizar la IA para brindar tutoría y apoyo académico personalizado.
Además de las plataformas de IA existentes, los profesores ya utilizan diferentes herramientas tecnológicas que se basan en la IA para elaborar y compartir contenido con los estudiantes. Por ejemplo, utilizamos Presentaciones de Google, Canva y PowerPoint, todas ellas con funciones de IA que proporcionan plantillas de fondo, imágenes y funciones de edición. También existen herramientas generadas por IA, como Duet AI dentro de Google Workspace Labs, que son útiles para la planificación y facilitación de lecciones.
Si deseamos enseñar a los estudiantes sobre IA, podemos utilizar el sólido sitio web de Google Arte y Cultura, que se dedica a explorar la IA y su conexión con el mundo real.
En cuanto a la instrucción en sí, podemos utilizar ChatGPT para generar planes de lecciones, cuestionarios y más.
IA para el compromiso
La participación de los estudiantes es una parte extremadamente importante de nuestras prácticas pedagógicas. Después de la instrucción, debemos permitir a los estudiantes el tiempo, el espacio y los recursos para explorar el contenido de maneras interesantes. Afortunadamente, la IA ya se ha incorporado a muchas herramientas que son excelentes para fomentar la participación.
Por ejemplo, Google Earth proporciona una excelente manera para que los estudiantes se sumerjan en vistas aéreas y en 3D de lugares de todo el mundo, lo cual es un complemento perfecto para clases de estudios sociales, geografía o antropología, e incluso para excursiones virtuales.
Las aplicaciones educativas basadas en juegos también brindan oportunidades de participación respaldadas por IA. Por ejemplo, Roblox y Minecraft utilizan IA para la creación e incluyen bots, y ambas herramientas están comenzando a incorporar capacidades de IA generativa.
Al hacerles saber a los estudiantes que la tecnología de IA ha hecho posibles todas estas oportunidades, podemos ayudarlos a adoptar la IA como parte de sus procesos de aprendizaje creativo.
IA para evaluación
No es fácil evaluar el aprendizaje de docenas o cientos de alumnos por parte de un solo maestro. Para satisfacer las necesidades individuales de los alumnos y realizar un seguimiento de su progreso, necesitamos utilizar sistemas que respalden nuestras prácticas.
Afortunadamente, podemos incorporar la IA a nuestras prácticas de evaluación utilizando aplicaciones educativas. Por ejemplo, tanto cuestionario como ¡Kahoot! utilizan algoritmos de IA para respaldar el desarrollo de preguntas, y conker utiliza IA para crear cuestionarios. Estas aplicaciones también utilizan la IA para evaluar la facilidad de los estudiantes con el contenido, avanzar a los estudiantes hacia contenido más avanzado y brindar consejos e instrucciones adicionales.
Al utilizar la IA como parte de nuestras prácticas de evaluación, podemos obtener datos eficientes y en tiempo real sobre el progreso de los estudiantes y descubrir qué apoyos específicos pueden necesitar.
La IA será parte del futuro de nuestros estudiantes. En lugar de idear políticas que prohíban su uso, debemos adoptarla de manera que mejore las experiencias de enseñanza y aprendizaje para nosotros y nuestros estudiantes, mientras anticipamos lo que está por venir.