Comentario
En 2019, Ericsson celebró un acuerdo de enjuiciamiento diferido con el gobierno de EE. UU. por utilizar agentes y consultores externos para sobornar a funcionarios gubernamentales y operar fondos para sobornos en China, Yibuti, Indonesia y Vietnam. Como parte de ese acuerdo, la empresa pagó una sanción penal de $520 millones. Ahora, los funcionarios estadounidenses dicen que la compañía violó los términos de ese acuerdo al ocultar otras acusaciones de conducta corrupta, incluida la mala conducta adicional en Djibouti y China. Ericsson tampoco reveló acusaciones y evidencia de mala conducta en Irak, dijeron funcionarios.
El año pasado, The Washington Post informó que los ejecutivos de la compañía no revelaron una serie de supuestas malas conductas en Irak durante una década, incluidas denuncias de fraude, sobornos y coimas.
Ericsson hizo negocios de telecomunicaciones en áreas de Irak que cayeron en manos de ISIS
La compañía con sede en Estocolmo dijo en una declaración escrita el jueves que “hoy no se ha alegado ni acusado ninguna conducta ilegal nueva”, y agregó que el Departamento de Justicia notificó a la firma “que no había proporcionado documentos e información” al departamento “en un manera oportuna” y “no había informado adecuadamente” información sobre una investigación interna relacionada con su negocio en Irak.
El CEO de Ericsson, Börje Ekholm, dijo en una declaración escrita que el nuevo acuerdo “es un claro recordatorio de la mala conducta histórica” que condujo al acuerdo de enjuiciamiento diferido en 2019. “Hemos aprendido de eso y estamos en un viaje importante para transformar nuestra cultura. .”
El Departamento de Justicia bajo Biden ha prometido investigar y perseguir de manera más agresiva y eficiente las irregularidades corporativas, incluso en una serie de discursos esta semana ante abogados del sector privado.
“Ericsson no aprendió la lección y ahora enfrenta un alto precio por sus continuos errores”, dijo Damian Williams, el fiscal federal en Manhattan.
Un juez federal aún debe aprobar el acuerdo de culpabilidad, que exige que Ericsson se declare culpable de los dos cargos originales del acuerdo de enjuiciamiento diferido de 2019, ambos violaciones de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero.
El nuevo acuerdo también requerirá que Ericsson esté en libertad condicional hasta junio de 2024.