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En el segundo episodio de la cuarta temporada de “Sucesión”, Logan Roy se reúne con sus hijos por primera vez desde que les impidió tomar el control de su compañía. Sin embargo, esta reunión es diferente a las anteriores. En lugar de tener lugar en una sala de juntas, se lleva a cabo en un karaoke. Además, Logan muestra una actitud inusualmente vacilante y deferente. Sorprendentemente, se disculpa cuando sus hijos se lo piden y parece concederles claridad cuando se lo solicitan. Incluso acompaña sus críticas con muestras de amor. Es evidente que algo ha cambiado en Logan.
La escena en el karaoke es un recordatorio contundente de cómo el espectáculo se alimenta de las raras muestras de ternura de los Roy. Aunque la trama del drama gira en torno a alianzas y traiciones, son estos momentos de vulnerabilidad los que más impactan al espectador. A pesar de su brutalidad y diálogos cómicos, los Roy anhelan una franqueza genuina entre ellos, aunque no puedan admitirlo abiertamente. Estos momentos de ternura revelan la tragedia de ser un Roy: necesitan desesperadamente el amor y apoyo mutuo, pero han llegado a creer que mostrar esa necesidad es una debilidad.
A pesar de la oportunidad de reconciliación que se presenta en el karaoke, los hermanos Roy no logran ver un camino hacia ella. Después de haber sido manipulados por Logan durante toda su vida, carecen del lenguaje necesario para llegar a acuerdos. No entienden el concepto de familia y amor, lo que lleva a interrumpir constantemente a Logan y evitar que se disculpe por sus acciones. La relación entre Logan y sus hijos está demasiado dañada para ser reparada, y los Roy luchan por encontrar y aceptar el amor.
A pesar de la rara muestra de ternura de Logan, al final del episodio se revela que su actitud cordial era solo una fachada. Logan proclama que se acerca la “Noche de los Cuchillos Largos”, mostrando su energía por despedir a sus hijos. Los Roy siempre han encontrado más fácil expresar crueldad que remordimiento, y esta vez no es diferente.
El patriarca de los Roy muestra una rara muestra de ternura en el último episodio de ”Sucesión”
Un encuentro inusual
En el segundo episodio de la cuarta temporada de “Sucesión”, Logan Roy se reúne con sus hijos por primera vez desde que les impidió tomar el control de su compañía. Sin embargo, esta reunión es diferente a las anteriores. En lugar de tener lugar en una sala de juntas, se lleva a cabo en un karaoke. Además, Logan muestra una actitud inusualmente vacilante y deferente. Sorprendentemente, se disculpa cuando sus hijos se lo piden y parece concederles claridad cuando se lo solicitan. Incluso acompaña sus críticas con muestras de amor. Es evidente que algo ha cambiado en Logan.
La importancia de la ternura
La escena en el karaoke es un recordatorio contundente de cómo el espectáculo se alimenta de las raras muestras de ternura de los Roy. Aunque la trama del drama gira en torno a alianzas y traiciones, son estos momentos de vulnerabilidad los que más impactan al espectador. A pesar de su brutalidad y diálogos cómicos, los Roy anhelan una franqueza genuina entre ellos, aunque no puedan admitirlo abiertamente. Estos momentos de ternura revelan la tragedia de ser un Roy: necesitan desesperadamente el amor y apoyo mutuo, pero han llegado a creer que mostrar esa necesidad es una debilidad.
La falta de reconciliación
A pesar de la oportunidad de reconciliación que se presenta en el karaoke, los hermanos Roy no logran ver un camino hacia ella. Después de haber sido manipulados por Logan durante toda su vida, carecen del lenguaje necesario para llegar a acuerdos. No entienden el concepto de familia y amor, lo que lleva a interrumpir constantemente a Logan y evitar que se disculpe por sus acciones. La relación entre Logan y sus hijos está demasiado dañada para ser reparada, y los Roy luchan por encontrar y aceptar el amor.
La crueldad en lugar del remordimiento
A pesar de la rara muestra de ternura de Logan, al final del episodio se revela que su actitud cordial era solo una fachada. Logan proclama que se acerca la “Noche de los Cuchillos Largos”, mostrando su energía por despedir a sus hijos. Los Roy siempre han encontrado más fácil expresar crueldad que remordimiento, y esta vez no es diferente.
En resumen, el segundo episodio de la cuarta temporada de “Sucesión” presenta un encuentro inusual entre Logan Roy y sus hijos, en el que Logan muestra una rara muestra de ternura. Aunque los Roy anhelan una franqueza genuina entre ellos, su relación está demasiado dañada para ser reparada. Al final, prevalece la crueldad en lugar del remordimiento.
