El Madrid demuestra que la posesión no es todo en el fútbol
El Real Madrid ha dejado claro en los últimos años que la posesión no es un factor determinante para su éxito en el campo. Mientras que otros equipos se enfocan en tener el balón, el Madrid aprovecha los espacios que deja el rival y despliega su verticalidad, mostrándose letal frente a la portería contraria. Por el contrario, cuando el Madrid tiene la posesión, le cuesta encontrar las grietas en las defensas rivales.
Un ejemplo reciente: el contundente 3-0 frente al Braga
En los últimos cuatro días, el Madrid ha dado dos ejemplos claros de su estilo de juego. En el empate 0-0 contra el Rayo Vallecano, el equipo tuvo un 63,27% de posesión, mientras que en la contundente victoria por 3-0 frente al Braga, la posesión fue de 47,94%. Los dos últimos goles del partido contra los portugueses llegaron en rápidos contraataques, demostrando la letalidad del Madrid cuando tiene espacio para correr.
Menos posesión, más goles
En los cinco partidos de esta temporada en los que el Madrid ha tenido menos posesión que el rival, el equipo ha logrado marcar siempre dos o tres goles, sumando un total de 13 goles en esos encuentros. Por ejemplo, contra Las Palmas, el Madrid tuvo un 47,04% de posesión y ganó 2-0 con goles de Brahim y Joselu. En el partido contra el Girona, el Madrid cedió el balón al líder de la Liga y ganó 3-0 con goles de Joselu, Tchouameni y Bellingham. Incluso en uno de los Clásicos más igualados en posesión de los últimos tiempos, el Madrid tuvo un 47,98% de posesión y ganó gracias a un doblete de Bellingham.
En cambio, en los seis partidos en los que el Madrid tuvo más posesión, el equipo tropezó en dos ocasiones, incluyendo el derbi contra el Atlético de Madrid y el empate 0-0 contra el Rayo Vallecano. Además, en estos partidos le costó más marcar goles, a excepción de la goleada 4-0 contra Osasuna.
Una tendencia constante
Esta correlación entre tener menos posesión y marcar más goles se ha convertido en una seña de identidad del Madrid en los últimos años. Aunque equipos como el Barcelona y el Manchester City también han demostrado éxito con este estilo de juego, el Madrid destaca por su consistencia. La temporada pasada, de los 15 partidos en los que tuvo menos posesión que sus rivales, el Madrid ganó nueve. En cambio, solo ganó dos de los cinco partidos en los que tuvo un 71% o más de posesión. Esta tendencia se mantuvo incluso en la temporada 2020-21, donde el Madrid logró seis victorias en los ocho partidos con menos posesión y solo tres victorias en los once partidos con más posesión.
En resumen, el Madrid demuestra que la posesión no es el factor determinante en el fútbol. Su estilo de juego vertical y letal en los contraataques le ha permitido obtener resultados positivos incluso cuando tiene menos posesión que el rival. Esta estrategia ha sido clave en su éxito en los últimos años y continúa siendo una parte fundamental de su juego.