Un nuevo estudio encuentra que los niveles elevados de NfL en pacientes EM están relacionados con el empeoramiento de la discapacidad

La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo. En sus etapas más graves, puede causar problemas de movimiento, rigidez muscular, debilidad, falta de coordinación y pérdida del control de la vejiga. Sin embargo, un nuevo estudio ha revelado que los pacientes con EM que presentan niveles elevados de NfL, un marcador de daño a las células nerviosas en la sangre, podrían enfrentar un empeoramiento de la discapacidad en uno o dos años.

Investigadores de la Universidad de California San Francisco (San Francisco, CA, EUA) llevaron a cabo un estudio pionero en el que examinaron el período previo al empeoramiento notable de la capacidad en pacientes con EM. Durante este período, se produce daño en el cerebro y la médula espinal. Los investigadores analizaron la incidencia de una discapacidad creciente, definida como un deterioro continuo durante seis meses o más, reflejado en una puntuación más alta en la Escala Ampliada del Estado de Discapacidad. Se distinguieron dos tipos de empeoramiento de la discapacidad: aquel asociado con una recaída (caracterizado por síntomas persistentes o el resurgimiento de síntomas anteriores) y aquel que avanza constantemente sin una recaída.

El equipo de investigación examinó datos de más de una década de alrededor de 4.000 visitas de pacientes a la Universidad de California San Francisco y aproximadamente 9.000 visitas a múltiples ubicaciones en Suiza. Estos estudios involucraron a cerca de 1.900 personas, de las cuales 570 experimentaron un empeoramiento progresivo de la discapacidad, independientemente de las recaídas. Los hallazgos revelaron que los niveles altos de NfL se asociaron con un aumento de hasta un 91% en la probabilidad de discapacidad que se intensificó con una recaída aproximadamente un año después, y un aumento de hasta un 49% en la probabilidad de progresión de la discapacidad sin una recaída casi dos años después. Los investigadores ahora se centran en identificar tratamientos que puedan detener esta progresión durante el tiempo en que los niveles de NfL están elevados.

Jens Kuhle, MD, PhD, comentó sobre los hallazgos del estudio, destacando el importante papel de NfL como marcador temprano de daño nervioso. Según Kuhle, el monitoreo de los niveles de NfL podría detectar la actividad de la enfermedad con mayor sensibilidad que los exámenes clínicos o las imágenes convencionales.

Este estudio pionero ha abierto la puerta a futuras investigaciones que buscan identificar tratamientos que puedan prevenir o retrasar el empeoramiento de la discapacidad en pacientes con EM. Los investigadores están enfocados en encontrar formas de detener la progresión de la enfermedad durante el período en que los niveles de NfL están elevados. Estos hallazgos podrían tener un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes con EM y ofrecer esperanza para un mejor manejo de esta enfermedad debilitante.

UC San Francisco